domingo, 28 de marzo de 2010

La primavera en Cristina Enea

Esta casa, apenas vislumbrada entre los árboles, podría antojársenos como un lugar siniestro, si no fuera por la deslumbrante luz de la primavera que baña la imagen.


Asciendes con esfuerzo la loma y te sorprenden nuevos colores entre la retama.

Una vez arriba el panorama es florido y tranquilo.



Y si te acercas descubres un hermoso palacete que te habla de glorias pasadas.
Es la antigua casa donostiarra del Duque de Mandas, que cedió a la ciudad con la condición de que mantuviese su nombre original, Cristina Enea, en recuerdo de su esposa Cristina Brunetti de los Cobos, y su carácter de parque no edificable.
El ayuntamiento cumplió su promesa y no sólo rehabilitó los edificios y mantuvo los jardines, sino que convirtió el palacete en un Centro de Recursos Medioambientales, que se encargará de estudiar y preservar el medio ambiente de Donostia y su entorno.


Esta es la fachada con la entrada principal al edificio.

Y esta es la trasera, con esa estructura acristalada añadida, que alberga el ascensor y unas escaleras



Frente a la casa, un busto de Fermín de Lasala y Collado, duque consorte de Mandas, el tipo que cedió estas propiedades. Es curioso cómo hay gente que se dedica a acumular riquezas para luego cederlas al final de sus días... en fin, sea como sea, me agrada el uso público que ahora se le da al edificio.


Y aquí el que escribe, rodeado de un público peculiar.






Gratuita apreciación, por otra parte, cuando nunca hemos visto caminar a un dinosaurio. Evidentemente me baso en las recreaciones de los documentales y las pelis, y ellos a su vez se basan en cómo caminan las aves actuales, así que, en este asunto, me temo que fue antes la gallina que el dino. Conclusión: ¡No sabemos cómo caminaban los Dinosaurios! Tan sólo suponemos.
Pero no dejen que esta tontería les disuada de visitar Cristina Enea.
Merece la pena, de verdad.

viernes, 19 de marzo de 2010

El túnel de Morlans

No se puede ser original; como mucho se puede aspirar a estar desinformado y así creer que has sido el primero en tener una idea. En cuanto te informas, osea, San Google, te caes del guindo.

Sí, hay varios que se han grabado circulando por el bidegorri de Morlans. Incluso hay un tubo del propio ayuntamiento. Abajo os pongo un par.
Lo original de mi caso es que lo cuento mientras pedaleo, vibrante ejercicio de periodismo"vérité" y que, en uno de mis míticos alardes de paroxismo narcisista, vuelvo la cámara hacia mi jeta y podéis observar cómo resuello. Mi Donosti no es nadie sin mí, como podéis suponer...



En el vídeo digo Bidebieta, donde debería decir Ibaeta, un error seguramente achacable a la hipoxia, estaba asfixiao, o simplemente a mi estulticia.

La verdad es que el interior de este túnel me parece uno de los espacios más singulares de la ciudad. Está completamente forrado de plástico blanco que, como la zona es muy húmeda, condensa los vapores formando una neblina que perla las paredes y gotea hasta el suelo. La iluminación artificial se vuelve evanescente en esta atmósfera brumosa y, si uno avanza en soledad y a un ritmo constante, tiene la sensación de estar atravesando otra dimensión.

Aquí los otros tubos de los que hablaba.

El institucional:
http://www.youtube.com/watch?v=rPO0jWXC5Gw

Y otro de un aficionado que lo ha editado con musiquita y todo:
http://www.youtube.com/watch?v=IxeOef-Vd5M&feature=related

sábado, 13 de marzo de 2010

Otro paseo nocturno


Esta escultura, a pesar de ser relativamente grande y de su llamativo color rojo, es una de las que menos controversia ha creado desde el día de su instalación en Donosti, una ciudad acostumbrada a polemizar sobre cualquier construcción que no sea de ladrillo caravista pardo. Podríamos decir que se ha integrado perfectamente en su entorno, y es que está expresamente concebida para él: Una puerta roja en Ategorrieta, palabra cuya etimología proviene de "ate gorria" es decir, puerta roja.
Me gusta esta obra y me agrada especialmente que por debajo discurra un "bidegorri", camino rojo, que es como llamamos en euskera a los carriles bici. Uno siente que han pensado por una vez en la bicicleta cuando cruza bajo este umbral; se siente protegido y digno entre tanto asfalto concebido para los coches.

Ategorrieta fue frontera, luego simple lugar de paso, y ahora es una encrucijada entre el pasado presente, que recuerda con este hito su historia.




domingo, 7 de marzo de 2010

La pampa en Donosti



Y que nadie pretenda encontrar un perfil xenófobo en expresiones como "invasora, foránea y americana" ya que sólo traslado lo que dice el Laboratorio de Botánica de la UPV.
Personalmente a mí me gusta esta planta. Y es de las regiones de América del sur, donde viven nuestros hermanos latinos... ¡Otra cosa es que fuera yankee! ¿Veis? ¡Esto sí es xenófobo! Ja jaj a jaja




Plumeros, Carrizo de La Pampa, Hierba de La Pampa, Hierbas de las Pampas, Cortaderia, Ginerio...

En los alrededores, y sobre todo en el solar contiguo al campo del Atlético, en Bera Bera, la altura de las matas supera la de una persona y ha creado un peculiar bosque con este aspecto.

Más abajo los muchachos, ajenos a esta plaga que amenaza con devorarlos, ja jaj ja aja ja ja ja, se entregan con pasión al entrenamiento del rugby. Tal vez dentro de unos meses lo hagan esquivando plantas y no adversarios...

sábado, 6 de marzo de 2010

Pintxos náuticos


Sí, bueno, podría escribir una crónica... pero no es mi estilo... y además otros lo van a hacer mucho mejor que yo, así que voy a poner el ripio que escribí sobre tan magno acontecimiento.
Que sí, que prestaba atención, pero las disertaciones eran muy largas y el lugar tremendamente inspirador, así que mi mente empezó a jugar con las palabras.



Club Náutico donostiarra
emblema de la bahía
si no perla, flor de nácar,
si no faro, buque guía.
Blanco, lineal, vanguardista,
moderno, racionalista
de mar o de ojo de buey,
o de txangurro o langostas
que se degustan en él.
Magistralmente trazado
por Aizpurua y Labayen,
seguro que uno curraba
y el otro se iba al baile
como baila en la Kabutzia
el obrero y el alcalde.

Club Náutico y malecón
fálica prolongación
refugio del litronero
soleado tostadero
y orgullo del maricón.
Sabemos que hubo pasado
porque nos das la medida.
Sabemos que existe el mar
porque tu frente lo mira.
Club Náutico varadero
ñoñostiarra y decadente,
liberal, pijo y decente,
emblemático y señero...
¡Orgullo del mundo entero!

Bueno, ya habéis visto, perpetré esto, pretendía servir como brillante colofón, jaja ja jaja pero luego nos extendimos hablando otra hora más, los donostiarras no sabemos terminar nada, característica esta aplicable también a la arquitectura, como se comentó en la tertulia, y casi mejor porque cuando terminas has acabado y si se acaba no hay más, y si no hay más pa qué vas a molestarte... y ya, que sí, que termino, porque en algún momento hay que hacerlo, pero no porque quiera... ¡que soy donostiarra, coño!

Veis, ¡uno que ya ha escrito una crónica decente!

¡Y otra muy buena!


lunes, 1 de marzo de 2010

Nuevo paseo nocturno


Este paseo nuevo por su nombre, en realidad es tan viejo como el hombre.


Como el eterno retorno que enseñan las olas.
Cambiar de lugar para cambiar de estado. Cambiar de lugar para volver a ser.


Como la lección que nos da la luna, la ley del opuesto.


Desde el pasado a la vanguardia, abriendo una puerta entre la luz y el hierro.


Que llega hasta el antes, que enseña el origen,


círculo retorno, el regreso a casa.